martes, 3 de diciembre de 2013

Cáncer en el cuerpo del niño

Los niños pueden tener cáncer en las mismas partes del cuerpo que los adultos, pero existen diferencias. Los cánceres de la niñez pueden ocurrir repentinamente, sin síntomas precoces, y tienen un índice de curación elevado. El cáncer más común en los niños es la leucemia. Otros cánceres que afectan a los niños son: tumores cerebraleslinfoma y sarcoma del tejido blando. Los síntomas y el tratamiento dependen del tipo de cáncer y de lo avanzada que esté la enfermedad. El tratamiento puede incluir cirugía, radiación y/o quimioterapia.

http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/cancerinchildren.html

Consejos para prevenir el cáncer desde la infancia



Recomendaciones para llevar un estilo de vida sano y evitar el riesgo de padecer cáncer desde que somos niños:


- Adoptar un estilo de vida sano para mantener y disfrutar de una buena salud. Evitar ambientes cargados de humo y contaminación.
Comer frutas y verduras todos los días. Están cargadas de vitaminas, antioxidantes y fibra para prolongar la buena salud de las células.
- Evitar el consumo de alimentos fritos o asados a la parrilla. El alimento está en contacto directo con ella, por lo que se queman produciendo benzopirenos, una sustancia cancerígena.
- Limita el consumo de alimentos preparados con humo, como los ahumados o los salazones, y los conservados en vinagre. Producen nitrosaminas, una sustancia cancerígena.
- Ingerir suplementos de vitaminas no reduce el riesgo de padecer un cáncer
Combate la obesidad. Las personas con sobrepeso tienen un riesgo más elevado de padecer tumores de mama, colon, endometrio y recto.
- Sustituye la proteína animal por la vegetal, siempre que sea posible.
- Evita el consumo masivo de edulcorantes, bebidas light y comidas rápidas sin ningún tipo de control.

¿Se puede prevenir el cáncer infantil?

En realidad, no existe una receta ni una fórmula que garantice a una persona que jamás padecerá un cáncer. Si así fuera, ya no existirían casos de cáncer en el mundo. El hecho de no conocer las causas del cáncer en la infancia convierte la prevención en algo difícil de realizar. Lo que sí existen son estudios que demuestran que el consumo de ciertos alimentos puede disminuir el riesgo de padecer determinados tipos de cáncer.





LUCHA CONTRA EL CÁNCER

Actualmente, se sigue intensificando la lucha contra el cáncer en las diversas facetas anteriormente señaladas:

1) Prevención, identificando y eliminando los factores cancerígenos del medio ambiente
2) Diagnóstico precoz mediante exámenes clínico, radiológicos y de laboratorio de núcleos de población aparentemente sana, especialmente de aquellos grupos particularmente expuestos a desarrollar algún tipo determinado de cáncer
3) Aplicación al debido tiempo y adecuadamente de los medios  terapéuticos de que se dispone actualmente (cirugía, radioterapia, quimioterapia)


(Cruz A. F., 2001)


INMUNIDAD Y CÁNCER

El  interés actual de los problemas de la inmunidad, puestos especialmente de relieve por los transplantes de órganos, también existen en el campo de la oncología.
Que los factores inmunológicos intervienen en el problema del cáncer ya fue reconocido por Clowes en 1905 al describir la regresión espontánea de un tumor injertado en pacientes que se mostraban refractarios a la reinoculación del mismo tumor. Aunque la regresión espontánea de un tumor es un hecho raro, en los casos en que se produce se debe probablemente al desarrollo de autoanticuerpos.

Los grandes progresos que se han conseguido en la inmunización de numerosas enfermedades contagiosas permiten vislumbrar avances parecidos en el mecanismo inmunitario del cáncer. Las posibilidades de una vacunación contra éste han venido estimulando la investigación hacia la búsqueda de antígenos tumorales específicos (sustancias capaces de despertar la producción de anticuerpos o defensas, por parte del organismo, capaces de detener el crecimiento del tumor)



(Cruz A. F., 2001)

CUIDADOS EN LA RADIOTERAPIA




Cuidados tras la radioterapia

Durante un tiempo breve después del tratamiento, deberá continuar con algunos de los cuidados especiales que tuvo durante el tratamiento. Por ejemplo, si tiene problemas en la piel una vez finalizado el tratamiento, sea cuidadoso con la piel del área tratada hasta que toda señal de irritación haya desaparecido. Puede que además necesite tiempo adicional para descansar mientras se recuperan y regeneran los tejidos sanos. Es posible que necesite limitar sus actividades para ahorrar energías y no trate de volver a su rutina anterior de inmediato.

Dolor tras la terapia

Algunos pacientes necesitan ayuda para controlar el dolor que continúa después de la radioterapia. Salvo que su médico indique lo contrario, no aplique calor ni frío para aliviar el dolor en ninguna de las áreas que se hayan tratado con radiación. Hable con su médico o enfermera y descríbale lo más detalladamente posible el lugar y el tipo de dolor. Continúe colaborando con su equipo de atención contra el cáncer hasta que se logre tener al dolor bajo control.

¿Cuándo deberé llamar al médico?

Después del tratamiento, es probable que esté más alerta de su cuerpo y de cualquier cambio leve que tenga de un día a otro. Si usted experimenta alguno de los problemas que aparecen a continuación, consulte a su médico inmediatamente:
  • Dolor constante, especialmente si lo siente siempre en el mismo lugar.
  • Masas, abultamiento o hinchazón.
  • Náuseas, vómitos, diarrea, pérdida del apetito o dificultad para tragar.
  • Pérdida de peso inexplicable
  • Fiebre o tos persistente.
  • Erupciones, moratones (hematomas) o pérdida de sangre inusuales.
  • Cualquier otra señal que le haya mencionado su médico o enfermera.
No dude en reportar cualquier problema o inquietud que surja a su médico. Siempre es mejor determinar la causa de un problema si se hace lo antes posible.


http://www.cancer.org/espanol/servicios/tratamientosyefectossecundarios/radioterapia/radioterapia-una-guia-para-los-pacientes-y-sus-familias-how-does-radiation-therapy-work

CAMBIOS E LA RADIOTERAPIA



Cambios en los recuentos sanguíneos

No obstante de ser muy poco común, la radioterapia puede causar recuentos bajos de glóbulos blancos, así como niveles bajos de plaquetas. Estas células sanguíneas ayudan al cuerpo a combatir las infecciones y a detener el sangrado. Si sus análisis de sangre muestran cambios en sus recuentos, puede que el tratamiento sea demorado alrededor de una semana para permitir que sus recuentos sanguíneos se normalicen. Es más probable que este efecto secundario se presente si usted además está recibiendo quimioterapia.


http://www.cancer.org/espanol/servicios/tratamientosyefectossecundarios/radioterapia/radioterapia-una-guia-para-los-pacientes-y-sus-familias-how-does-radiation-therapy-work

ADMINISTRACIÓN DE LA RADIOTERAPIA




¿Cómo se administra la radioterapia?

La radioterapia puede administrarse de tres maneras: como radiación externaradiación interna o radiación sistémica. En algunos casos se emplea más un tipo.
La radioterapia externa (o radiación de rayos externos) usa una máquina que dirige los rayos de alta energía hacia el tumor y algunos tejidos normales alrededor. La mayoría de las personas recibe radioterapia externa durante el transcurso de varias semanas en las que las sesiones se realizan de manera ambulatoria en un centro de tratamiento u hospital.
La radiación interna (o braquiterapia) utiliza una fuente radiactiva en forma de ya sea un alambre, semilla, píldora o globo pequeño que se conoce como un implante, el cual se coloca dentro o cerca del tumor en el cuerpo. La radiación que proviene del implante tiene un corto alcance, por lo que tiene muy poco efecto en los tejidos normales del cuerpo. En algunos casos, puede que los pacientes requieran permanecer hospitalizados mientras reciben la radicación interna.
A veces, después de que se extirpa un tumor quirúrgicamente, se colocan implantes radiactivos en el área en donde estaba el tumor para eliminar cualquier célula cancerosa que pudiera haber quedado.
Los implantes pueden ya sea dejarse dentro del paciente como implantes permanentes o éstos pueden ser retirados después de cierto tiempo.
La radiación sistémica se administra mediante radiofármacos, los cuales son medicamentos radiactivos para tratar algunos tipos de cáncer. Estos medicamentos consisten de fuentes radiactivas al descubierto que pueden administrarse por vía oral o inyectarse, y que por tanto tienen un alcance en todo el cuerpo. El tratamiento con radiofármacos a menudo requiere de una breve estadía en el hospital.
Decidir qué clase de radiación se usará depende del tipo de cáncer que tenga y en qué parte de su cuerpo se localice.

http://www.cancer.org/espanol/servicios/tratamientosyefectossecundarios/radioterapia/radioterapia-una-guia-para-los-pacientes-y-sus-familias-how-does-radiation-therapy-work

LA RADIOTERAPIA




¿Cómo funciona la radioterapia?

Todas las células crecen y se dividen para formar nuevas células. Sin embargo, las células cancerosas lo hacen más rápidamente que muchas de las células normales a su alrededor.
La radioterapia utiliza equipo especial para enviar altas dosis de radiación hacia las células cancerosas. Esto daña las células cancerosas causando que éstas mueran. La radiación funciona al romper un segmento de la molécula del ADN dentro de la célula cancerosa, lo cual impide que la célula crezca, se divida y se propague. Puede que algunas células sanas alrededor se afecten con la radiación, pero la mayoría se recupera y vuelve a tener una función normal.